sábado, 9 de marzo de 2013

Seamos maestras

Seamos críticas, seamos constructivas, seamos maestras.

Tengamos en cuenta que, ser maestra no es el simple hecho de sacarse una carrera y ponerse delante de 25 niños a hacer fichas, hacerles jugar y cantar con ellos.
Ser maestra es mucho mas que eso, ser maestra es ponerse delante de 25 niños, sonreirles a cada uno de ellos y saber que, dentro de cada una de esas 25 cabecitas hay un mundo inmenso. Un mundo que irá creciendo y para el que tenemos que servir de apoyo, de base, de ayuda, pero nunca dirigir y adoctrinar su crecimiento personal.
Ser maestra es ser inconformista con cualquier sistema educativo que reprima la creatividad y la libertad de pensamiento. Ser maestra es luchar contra las injusticias, no tolerar las desigualdades sociales.
Ser maestra es transmitir (que no enseñar) a tus alumnos solidaridad, respeto, tolerancia, ganas de aprender...

El sistema educativo, así como la sociedad que lo ampara, no solo no protesta contra esta educación destructiva de las mentes, sino que la premia.

Centrémonos en el aprendizaje significativo, en la experiencia y en la resolución de conflictos, en la libertad de pensamiento y de expresión. En premiar la curiosidad, las ansias de aprender, en vez de en reprimir las dudas y cuestiones que muchos se plantean.
Centrémonos en crecer y hacer crecer como personas a las niñas y niños que vamos a educar.
Centrémonos en cambiar lo que entiende la sociedad por educación.
Centrémonos en las personas que van a ser y no en el número de hojas que son capaces de rellenar. 

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